Torero alucinogeno camina desenfrenado.
Han reclamado su ausencia en el cielo y en el infierno. Le han buscado en fosas comunes, entre cadáveres. Aullaron su nombre. Le escribieron. Lo tallaron en sus pieles, en sus corazones.
De allí, de su nombre tanto clamado, nació un arbusto. Tres días despues dos de los arbustos empezaron a bailar hasta desojarse. Un arbusto dió frutos como las cerezas pero de varios colores. Otros tres desarrollaron bocas: se comieron a un niño, a su pelota, a su madre que reclamó, a una cigueña, a un dodo y a un animal tan extraño que tendremos que esperar a amarrarnos un mismo día los dos, a la vez, los cordones del zapato izquierdo, para poder conocerlo, hasta entonces... y finalmente, dos arbustos empezaron a cantar. Aún cantan. el torero ya no lo ignora. Camina a su encuentro. Mientras tanto el pequeño jukumary, tras juguetear en el monte, se alista para trepar por un árbol hasta el hueco por donde sale el humo y desde allí volar y cambiar de piel, como a toda serpiente le corresponde. el pequeño jukumary dejara de ser un oso, quiere despertar señor brujito el día de mañana. Buscaré tu nombre en cualquier libro que a mi paso encuentre. desde allí te haré cosquillas. encontraré tu ombligo. soplaré por él. Te inflaré. nos iremos a pasear. Volaremos. hermano mio. La serpiente alada viajará contigo al encuentro de Croatán, del dorado, de la piedra filosofal, de la noche, de sodoma, de utopia, de nuestros hermanos perdidos al otro lado del espejo. La Radio Perdida comunicará oportunamente los resultados de tal expedición. el anciano chiquito nacerá de ese desastre. Observará los resultados. Reirá. No podrá detenerse. Reiremos todos. Cual niños reiremos sobre las ruinas de nuestra decadencia y nuestra evolución. Algo más que un hogar nos espera. La peregrinación es más que eterna: es la condición de nuestras vidas y nuestras muertes.
Torero: acaricia al animal entre tus faldas. Besalo. Hazle reir. Hazle llorar. Invitale de tu lata de pbc. y canta conmigo: ahora los pibes andamos viajando el que quiera que le convide que levante la mano. eso es todo por hoy.
Me despido desde mi bien rara galaxia. Esperando su pronta comunicación. No se extrañe si le parece observarme en una piedra o en una ramita caida de un árbol. Soy yo,por supuesto; que le me he aparecido para saludarle.
El señor brujito.
Han reclamado su ausencia en el cielo y en el infierno. Le han buscado en fosas comunes, entre cadáveres. Aullaron su nombre. Le escribieron. Lo tallaron en sus pieles, en sus corazones.
De allí, de su nombre tanto clamado, nació un arbusto. Tres días despues dos de los arbustos empezaron a bailar hasta desojarse. Un arbusto dió frutos como las cerezas pero de varios colores. Otros tres desarrollaron bocas: se comieron a un niño, a su pelota, a su madre que reclamó, a una cigueña, a un dodo y a un animal tan extraño que tendremos que esperar a amarrarnos un mismo día los dos, a la vez, los cordones del zapato izquierdo, para poder conocerlo, hasta entonces... y finalmente, dos arbustos empezaron a cantar. Aún cantan. el torero ya no lo ignora. Camina a su encuentro. Mientras tanto el pequeño jukumary, tras juguetear en el monte, se alista para trepar por un árbol hasta el hueco por donde sale el humo y desde allí volar y cambiar de piel, como a toda serpiente le corresponde. el pequeño jukumary dejara de ser un oso, quiere despertar señor brujito el día de mañana. Buscaré tu nombre en cualquier libro que a mi paso encuentre. desde allí te haré cosquillas. encontraré tu ombligo. soplaré por él. Te inflaré. nos iremos a pasear. Volaremos. hermano mio. La serpiente alada viajará contigo al encuentro de Croatán, del dorado, de la piedra filosofal, de la noche, de sodoma, de utopia, de nuestros hermanos perdidos al otro lado del espejo. La Radio Perdida comunicará oportunamente los resultados de tal expedición. el anciano chiquito nacerá de ese desastre. Observará los resultados. Reirá. No podrá detenerse. Reiremos todos. Cual niños reiremos sobre las ruinas de nuestra decadencia y nuestra evolución. Algo más que un hogar nos espera. La peregrinación es más que eterna: es la condición de nuestras vidas y nuestras muertes.
Torero: acaricia al animal entre tus faldas. Besalo. Hazle reir. Hazle llorar. Invitale de tu lata de pbc. y canta conmigo: ahora los pibes andamos viajando el que quiera que le convide que levante la mano. eso es todo por hoy.
Me despido desde mi bien rara galaxia. Esperando su pronta comunicación. No se extrañe si le parece observarme en una piedra o en una ramita caida de un árbol. Soy yo,por supuesto; que le me he aparecido para saludarle.
El señor brujito.
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