martes, 23 de julio de 2013

Fábula de la pequeña niña y las golosinas.










Érase una vez una pequeña niña muy golosa, tan golosa que tan sólo se alimentaba de  redondas golosinas.
Sus  padres le decían: !Niña! -oh- !pequeña y golosa niña! !algo malo tendrá que sucederte,  si no dejas   de robar y  comer  tantas golosinas!
Y ella desoía los amorosos  consejos de sus padres y seguía devorando sin complejos sus infames golosinas.
Hasta que llegó un soleado día en el  que sus padres llegaron a casa y llamaron: Oh ¿dónde estás  pequeña niña? 
La buscaron por todas las esquinas, detrás de cada puerta y en la buhardilla.
 Y por más que buscaron  y gritaron no hubo por respuesta ni un llanto, ni una sonrisa. 
Las ventanas estaban cerradas, las escaleras seguían como recién barridas. 
No existía lógica humana  ni divina que explicará cómo tan agraciada  niña podía haber  desaparecido sin dejar siquiera una hebra de su cándido cabello...
...Nunca mas hallaron a la pequeña niña de las golosinas...

Se la llevaron las hormigas mientras dormía.
Lo que nadie  supo ( o todos hicieron como que nadie  sabía) es que mientras las hormigas  la raptaban , para llevarla al centro del hormiguero allí en el ombligo de la tierra,  era que sus lágrimas no eran saladas como el fondo  del mar , sino dulces como la sangre de las bestias  sobre la arena y  como el llanto de las golondrinas.

( De los "Cuentos para dormir a un Niño Lobo")
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